(Foto tomada del Facebook del Director del IPADE. Realizada con la maestría que siempre carateriza a Gerardo Cruz Morán)
Para mí el Claustro (Reunión) Anual de Profesores del IPADE es el final de un ciclo académico, pero especialmente es el inicio de otro. Como se realiza a inicios de agosto siempre me tocá después de unas vacaciones (espero que pueda calificarlas de merecidas). Así que casi siempre llego bastante fresco, aunque, conforme pasan los años, el nivel de “frescuridad” va siendo un poco menor.
Este año tuvo algunas cosas especiales para mí. La primera fue la visita de uno de mis 21 sobrinos al IPADE. Acompañado de su esposa, sus suegros y una tía de su esposa, estuvieron unos días visitando el otrora México, D.F. Con relación al conocimiento de la CDMX no hay nadie mejor que Ana María, mi secretaria, le recomendé a “Marito” a que se “abocara” con ella para cuestiones de estancia, visita y especialmente comida. Como es usual, Anamary quedó en alta estima de Marito porque todo lo que les recomendó estaba de 5 estrellas; especialmente todo lo referente a las comidas salió de primera… Y la visita al IPADE también estuvo muy agradable y la pasamos muy bien todos, recorriendo la Antigua Hacienda de San Antonio de Clavería.
(Hago unas acotaciones de las dos palabras que puse entre comillas en el párrafo anterior. A Marito le decimos así porque es hijo de Mario… pero el tal Marito mide como 1.97 mts, lo que resulta divertido que todos le digamos con ese diminutivo. Y la otra palabra, “abocar” es que es una palabra que nunca me ha gustado, pero que en algunos lugares de Guatemala la usan mucho.)
El segundo evento especial fue que por primera vez tuvimos reunión de profesores del Área de Análisis de Decisiones. A lo largo de los años habíamos sido dos, luego uno, luego dos, y ahora tres. Cuando estaba sólo yo como profesor se me aplicaba aquel chiste malo “que si me ven caminando hablando sólo, es que estoy en reunión de área”. Pero ahora resulta que ya somos tres profesores, un profesor en formación (un joven que promete mucho) y el asistente (a quien le debo mucho, de quien he aprendido mucho y que tiene un futuro muy promisorio por su capacidad de trabajo, previsión, cuidado de detalles y demás). Pero bueno, la cosa es que me siento presidiendo la reunión ya que como Director de Área la había convocado; mi primer y único acto de dirección en esa reunión, fue entregarle el puesto a Beto, quien desde hacía dos días era el nuevo jefe. Fue muy agradable poder atisbar el futuro del área de Análisis de Decisiones ahora que tenemos más “capacidad instalada” de clases. Esperemos que los planes salgan bien.
(Gabriel, Saulo, Beto, Javier y Gabriel, en la «magna» reunión del Área de Análisis de Decisiones)
Pasando al Claustro, me parece que será imposible hacer un resumen adecuado sin omitir nada importante. El primer día fue un día dedicado a la investigación, o mejor dicho, a cómo debe investigarse: muy interesante y esperemos que eso dé mucho fruto. El segundo día, durante la mañana hubo unas tres pláticas sobre cosas internas del IPADE, con unos números bien interesantes de cómo se ha ido creciendo en los profesores, ya que, debido a los años, todo el proceso de sustitución ha de empezar con muchísimo tiempo de anticipación. Terminamos la mañana juntándonos con los directivos no profesores del IPADE y los cónyuges respectivos. Y la primera actividad de esta nueva etapa del Claustro fue el tema clásico de todos los Claustros: la situación económica de México. Luego la foto, que aquí acompaña, y el almuerzo (comida), muy agradable. Luego una conferencia y la actividad cultura, que consistió en una visita al Castillo de Chapultepec con una obra de teatro sobre el Emperador Maximiliano; lamentablemente no pude asistir a esta visita… otra vez será. El último día, viernes, por la mañana tuvimos el también tradicional mensaje del Señor Rector y un par de conferencias. Terminando con el reconocimiento a dos grandes profesores del IPADE: Carlos Ruiz González y Agustín Llamas, quienes han pasado a ser profesores decanos.
Este es el resumen de las actividades. Paso ahora a transcribir algunas cosas que anoté y me llamaron la atención. Quizá no tengan ilación una con otra, pero quizá pueden engrosar aquella lista de “datos interesantes pero inútiles” que tengo acumulados por algún lado.
De la situación económica y social de México lo que más me sorprendió fue el siguiente dato: México en 2010 tenía un 6% de adultos mayores de 65 años; para 2030 se tiene previsto que sean 15%. En 26 años este aumento es demasiado rápido; USA tardó 69 años en tener este crecimiento y Francia 115 años. ¿Qué va a pasar con las pensiones? ¿Se podrá aumentar la edad de jubilación para que estos “viejitos” de 65 años puedan seguir trabajando por lo menos unos 5 años más? Lo que sea que vaya a pasar, será interesante, complejo y complicado.
Ah, y de esta parte económica, también me gustó la frase de cómo está la situación económica de México en agosto de 2019: “Estancamiento sin rebote a la vista”.
El padre Cristian, profesor en Italia de una Universidad Pontificia, nos dio un par de conferencias: una sobre desarrollo de países y otra sobre las nuevas tecnologías. Empezó con una frase que me gustó mucho, que además es de uno de los hombres que más admiro, el famoso Marco Tulio Cicerón: “Hay que hacer cosas para ser escritas y escribir cosas para que sean leídas”. Espero que este post de hoy esté entre las segundas.
En la conferencia sobre desarrollo de los países fue comentando ideas bien interesantes sobre la pobreza. Decía que hay pobreza material, pero que la peor es la pobreza antropológica. Donde hay pobreza antropológica hay pobreza material. Y de ésta se sale cuando se resuelve la primera. Donde hay violencia, drogadicción, abuso, etc., siempre habrá pobreza material. Pero donde hay “sólo” pobreza material, la vida es más digna, porque hay esperanza, posibilidades de crecimiento… siempre dentro del súper complejo tema de la pobreza. Una de las cosas que recomendaba era siempre dialogar con la gente a la que se quiere ayudar. Contaba que en una zona muy pudiente de la Ciudad de México se metieron los ladrones a varias casas; los ladrones eran vecinos pobres de esa zona. Unos robados fueron a hablar con los ladrones; su inquietud estaba en que parte de las cosas robadas era comida; lograron saber que no tenían trabajo y por lo tanto no tenían dinero para dar de comer a su familia… así que en lugar de poner más cámaras, más alambre espigado electrificado, lo que hicieron fue ofrecerles trabajo… y se acabaron los robos. Insistió mucho en la solidaridad, en trabajar juntos, incluso con las mismas personas a la que se ayuda.
Sobre la conferencia de la madurez integral habría casi que preparar un curso. Pero me quedo con una anécdota que me hizo recordar mucho a varias personas muy queridas y admiradas por mí. Le preguntaron a un empresario mayor, que había tenido éxito (entendiendo éxito como un buen rendimiento sobre sus inversiones en general). Pues este señor, ya mayor, decía que había tenido éxito en la vida por pasión y por preparación. Se había preparado mucho y le había puesto mucha pasión a lo que hacía.
La última conferencia sobre los desafíos del mundo digital me hizo recordar una conversación que tuve hace unos 15 ó 20 años con un señor mayor. Yo afirmé rotundamente que el internet no era más que un nuevo canal de distribución; este señor, un empresario con muchos años de experiencia y bastante mayor que yo me contradijo inmediatamente, diciendo que el internet había venido a cambiar todo. Aquí al hablar de internet, nos referíamos a la nueva tecnología, no sólo el internet. Pues, ya en 2019 he tenido que reconocer que estaba súper equivocado: la tecnología o el internet no es sólo un nuevo canal de comunicación, sino que nos ha cambiado rotundamente. Hasta las generaciones han sido marcadas por estas nuevas tecnologías. Hay una cultura del mundo digital. El mundo virtual es real e ideal… paradójico. Y dentro de este mundo digital en el que vivimos, no debemos perder de vista que lo que más atrae al ser humano es el ser humano mismo: con sus imperfecciones, lentitudes, al mismo tiempo que impredecible. Por eso no hay que dejar de lado todo lo humano, toda la relación humana. El problema principal es que estamos “intoxicados” de información… y eso evita la reflexión.
Termino esta parte con una anécdota que contó Cristian. Un joven europeo, me parece que inglés, dio un viaje alrededor del mundo cuando estaba joven. Llegó a un lugar en el que encontró a un niño pobre a quien el inglés le dijo: “pídeme lo que quieras que te lo doy”. Y el niño en su sencillez le dijo “necesito un lápiz porque se me terminó el mío y no he acabado la tarea”. El inglés desconcertado le dijo: “a ver mijo, creo que no has entendido. Pídeme lo que quieras y yo te lo puedo dar… ‘l o q u e q u i e r a s’, le recalcó”. Y el niño, con sencillez le volvió a decir: “sí, un lápiz para terminar mi tarea”. El inglés sacó partido a esa enseñanza de un niño pobre de un país subdesarrollado. Unos cuantos años después, este inglés, convertido en empresario de éxito, financia 300 escuelas por todo el mundo. Increíble cómo un pequeño toque puede provocar cosas tan buenas.
No me quiero despedir de este “informe” del Claustro 2019 sin mencionar nuevamente a Carlos y Agustín, agradecerles por lo que he aprendido de ellos y por todo lo que han hecho en el IPADE y desde el IPADE. Pero principalmente agradecerles su amistad y desearles una jubilación activa, pues estoy convencido que no dejarán de seguir esparciendo bien por el mundo. Mil gracias.
«Hola Javier, buenos días!!! Me encanto el toque tan humano y fresco que le pusiste a tu relato en torno al claustro! Sin duda es un muy breve paseo por las grandes avenidas de nuestra reunión anual!!
Disfruté mucho que incluyeras fotos y la parte donde cuentas sobre tu reunión del área es sencillamente sensacional!!! Sobre todo por todas y cada una de la personas que la integran y a quienes tengo el gusto de conocer.
Al igual que tu! La anécdota sobre El Niño que solo quería un lápiz para hacer su tarea, me dejó huella!
Cuantas veces nos complicamos pensando que para ser feliz se requieren grandes inversiones que llegan a ser inaccesibles… y esta anécdota nos demuestra la sencillez en las aspiraciones de un niño! Y esto es trasladable a los jóvenes, adultos y ancianos… podemos ser felices viviendo en conciencia cada momento desde la
Simplicidad y la cotidianidad de nuestra existencia que a veces pareciera larga… a veces corta … e incluso imperceptible
Pero la realidad es que nuestra existencia en el aquí y el Ahora es solo un punto en la línea infinita del regalo de la vida que Dios nos dio!
Me llevo que así como pudiste disfrutar a plenitud la
Presencia de Marito O Marote jajaja!!! Todos podemos disfrutar lo grande, lo
Pequeño, lo trascendente y lo efímero de todos y cada uno de los momentos de nuestra vida!
Gracias por compartir tus reflexiones y por ayudarnos a hacer un breve alto en el camino para reflexionar !
Un abrazo y nos vemos pronto»
